Algo está cambiando en los procesos de selección y reclutamiento. Lo cierto es que siempre han pecado de aburridos. Mientras otros procesos de gestión del área de recursos humanos, especialmente la formación, ha sabido incorporar elementos emocionales que potencian el engagement de las personas, no así el área de evaluación y selección. ¡Hasta ahora!

En la actualidad son varios los factores a tener en cuenta que están impulsando la introducción de técnicas de selección que generen un vínculo emocional con los candidatos. A nuestro parecer, los más destacables son:

● La incorporación de una nueva generación: los millennials.

El movimiento millenial se ha incorporado al mercado laboral con un cableado mental diferente. Tal y como demuestra el estudio “Millenials en un mundo post-industrial”, son profesionales, con todas las letras. Se trata de una generación más colaborativa y menos competitiva, más conceptual y menos autónoma, pero especialmente destacan por ser más receptivos a lo emocional.

● La estructuración de nuevas disciplinas.

La gamificación siempre ha existido, como la formación o la evaluación. Sin embargo, actualmente se ha estructurado su conocimiento para trasladar al ámbito profesional dinámicas y mecánicas de juego de una manera lógica, sistemática y procedimentada.

● El factor estratégico.

Parece que, por fin, los departamentos de dirección están dejando de ver la selección como el mal necesario para resolver la rotación, y más como un factor estratégico de competitividad. Ya empieza a asentarse la idea de que un proceso de selección optimizado y que atraiga a los mejores es un valor o ventaja competitiva para tu empresa. De ahí la importancia creciente de las políticas de employer branding, cada día más comentadas.

Gran parte de estas nuevas técnicas de selección pasan por la aplicación de herramientas de evaluación que, cumpliendo con todas las garantías técnico-científicas de fiabilidad y validez, aplican estrategias gamificadas que consiguen convertir la evaluación en un juego. Actualmente podemos hablar de dos tendencias de gamificación protagonistas:

● Desarrollar herramientas de evaluación y convertirlas en un juego.

Consiste en incorporar dinámicas y mecánicas de juego en una prueba de evaluación, tales como retos, puntos, storytelling, niveles, etc. El objetivo es convertir una tarea aburrida en algo divertido y retador, sin que ello afecte a la calidad de la evaluación.

● Utilizar juegos para evaluar.

Esta tendencia comenzó allá por el 2007, cuando la prestigiosa revista “HealthDay” publicó un artículo que revelaba que «los cirujanos que habían jugado videojuegos en el pasado durante más de tres horas a la semana cometían un 37 por ciento menos de errores, eran un 27 por ciento más rápidos, y obtenían resultados generales un 42 por ciento mejores que los cirujanos que nunca habían jugado videojuegos». La técnica consiste en transformar un juego en una herramienta útil para obtener una evaluación predictiva del desempeño sobre una tarea.

En este sentido suites de evaluación como smartPredict de cut-e han sabido aunar lo mejor de estas dos técnicas para desarrollar cuatro herramientas de evaluación gamificadas que cumplen con todas las garantías de fiabilidad y validez y además, están optimizadas para su respuesta en smartphone. Compartimos este vídeo ilustrativo de la suite smartPredict para que puedas verlo en detalle: