¿Cómo mejorar la productividad empresarial?

Está claro que la mejora de la productividad laboral está entre las grandes prioridades de empresarios y empleados. Lo que también está claro es que para conseguir el mayor rendimiento en las organizaciones de hoy en día es necesario un cambio de mentalidad y un cambio en las prácticas corporativas para crear ambientes laborales más integradores.

Desde hace años este debate está a la orden del día, y hoy más que nunca podemos seguir hablando de que el presentismo está instaurado en nuestras corporaciones. El pensamiento, un tanto arcaico, de que por estar más horas en el puesto de trabajo se es más productivo sigue siendo habitual. Para conseguir evolucionar e incentivar la productividad debemos virar dicho pensamiento a objetivos tales como fomentar la motivación, incentivar la creatividad y buscar el bienestar de nuestros empleados. Es importante incorporar esta dinámica de trabajo en la actual cultura empresarial y saber  transmitirlo bien a nuestros empleados, dándoles las herramientas para que apliquen estas técnicas a su día a día.

En nuestra amplia experiencia en procesos de digitalización, reclutamiento y auditoría hemos sacado interesantes conclusiones.  A continuación enumeramos de manera generalista, las prácticas más beneficiosas para aumentar la productividad y crear ambientes de trabajo positivos y motivadores en tu empresa:

TÉCNICAS DE TRABAJO ACTUALIZADAS

Los directivos tienen la responsabilidad de mejorar, actualizar o cambiar conductas de trabajo antiguas y poco productivas. La modernización de la manera en la que se desarrolla la actividad de la empresa será clave para generar ambientes provechosos. Crear unas dinámicas de trabajo creativas, novedosas, que fomenten el trabajo en equipo y que hagan que las personas salgan de su zona de confort, ayudará a que los trabajadores se sientan más motivados. Incluir la digitalización en los procesos es un factor clave para garantizar el éxito de estas técnicas.

PAUSAS ACTIVAS

El descanso es fundamental en cualquier tipo de trabajo. Descansar después de cada actividad, estirar las piernas evitará futuros problemas de espalda, cabeza y bajará el nivel de estrés. Disponer de cafetería y comedor en condiciones, o crear espacios destinados únicamente a relax, en los que poder hacer una pausa activa como tomar un café o realizar una reunión informal, son clave para reducir el agotamiento mental y el físico, y hará que los empleados se sientan más confortables en su lugar de trabajo.

AUTONOMÍA

La formación de empleados autónomos, que tengan la capacidad de priorizar tareas, planificar sus actividades y optimizar sus horarios también es parte de la responsabilidad de la empresa. Tenemos que dotar al empleado de herramientas que le faciliten la organización del trabajo, la capacidad de crear listas de tareas para poder cumplirlas, que puedan establecer plazos de entrega realistas y que se impliquen en la calendarización de los proyectos grupales.

TELETRABAJO

Cada vez más, las empresas optan por ofrecer diferentes opciones de teletrabajo. Son muchas las ventajas que proporciona esta forma de trabajo en ambas direcciones.  La conciliación con la vida familiar y personal para el empleado y la reducción de costes de mobiliario y equipo informático para la empresa, son algunos de los beneficios. Gracias al teletrabajo, el trabajador tiene un mayor sentimiento de libertad. Los horarios y el no tener que desplazarse, le permiten una mayor capacidad de organización y de autonomía. Nosotros en The Key Talent lo practicamos, y mucho.

FLEXIBILIDAD HORARIA

Apostar por la flexibilidad horaria, es clave para que el empleado pueda disfrutar de su vida privada. La optimización de horarios es posible y ayudará a reducir la sensación de pérdida de tiempo o de falta de disfrute de tiempo familiar. Esta medida, pasa también por optimizar la hora de la comida. Es muy habitual ver en las empresas españolas parones para comer de una o incluso dos horas, y está demostrado que si se dedican 30 – 45 minutos para comer, la carga de trabajo se mantiene estable a lo largo de la jornada y la productividad aumenta. De esta manera, también se consigue adelantar la hora de salida, algo muy positivo para la felicidad del trabajador.

PON PASIÓN EN TODO LO QUE HACES

La pasión por el trabajo es lo que más puede ayudar a la mejora de la productividad. La pasión por lo que hacemos está dentro de cada uno, pero desde las organizaciones se puede mejorar e incentivar ese sentimiento con acciones como implicar a nuestros empleados en los objetivos de la empresa o considerarlos el cliente más importante con el que se tiene que establecer una comunicación fluida y bidireccional. Esto, siempre ayudará a fortalecer su pasión, que va muy relacionada con el ambiente en el que se trabaja y con el grado de implicación que le ofrece la empresa. El aprovechar el talento y retenerlo solo será posible si incentivamos su motivación y si el trabajador se siente parte de los logros de la compañía. Una persona que disfruta con lo que hace será siempre mejor trabajador.

Existen muchas maneras de mejorar la productividad en las empresas. Pero lo que está claro es que todas pasan por el cuidado y el bienestar del trabajador. El sentirse a gusto en un puesto de trabajo, es el indicador número uno para el aumento de la productividad. Y tú, ¿qué técnicas aplicas para mejorar los índices en tu empresa?

NOTA: artículo escrito en colaboración con Social Reacher.